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Hojas: Generalmente opuestas, pecíolos de 3 a 12 mm de longitud, con o sin pelos, láminas ovadas a oblongo-ovadas, de 2 a 12 cm de longitud y de 0.5 a 6 cm de ancho, ápice agudo o redondeado, base cuneada, cordada u obtusa, margen crenado (con dientes redondeados)-aserrado, con pelos en ambas superficies, envés en ocasiones sin pelos.
Inflorescencia: En forma de cabezuela de 0.5 a 3 cm de diámetro, pedúnculos de 2 a 14 cm de longitud, brácteas lineares u oblongo-lanceoladas, de 3 a 7 mm de longitud, con pelos rectos de base redondeada.
Flores: Con cáliz de aproximadamente 2 mm de longitud; corola color naranja o rojo, tubo de 7 a 10 mm de longitud con pelos suaves y largos.
Frutos y semillas: El fruto es agrupado, esférico, negro, de aproximadamente 3 mm de diámetro, jugoso y carnoso.
Raíz: Pivotante.
Toxicidad:
Toda las partes de la planta son tóxicas, principalmente las hojas que contiene ácido triterpénico (Lantadeno A y su isómero Lantadeno B), el cual varía en su concentración desde 0,5 % al 2,2 % en las hojas secas, de acuerdo a la especie o variedad. El Lantadeno A es más tóxico que el Lantadeno B.
Estas sustancias ingeridas en cantidades aproximadas de dos o mas gramos por kilogramo de peso del animal, causa intoxicación, y muerte si no es tratada a tiempo.
Los tóxicos de la Lantana son absorbidos a nivel intestinal, principalmente en el intestino delgado; la absorción permanente en muy pequeñas dosis ya es suficiente para desencadenar y mantener la intoxicación.
Los efectos que se presentan en forma paulatina, comenzando alrededor de las 24 hs de la primera ingesta, con debilidad acompañada por una marcada ictericia y fotosensibilización (afección dérmica de las capas superficiales de la piel poco pigmentada.
Luego, gastroenteritis, diarrea acuosa o sanguinolenta, y conjuntivitis en el último estadio
Para el caso de pequeñas y constantes cantidades, pueden llegar a causar lesiones hepáticas y renales
En los casos severos puede haber ulceración de paladar, lengua, y complicaciones secundarias como opacidad corneal, e invasión bacteriana de los tejidos dañados. |